Mi experiencia de movilidad, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Puebla, México

Ari Adrian Leon Beretta, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Puebla, México.

Mi experiencia en la ciudad de Puebla, la podría definir como la mejor a mis 21 años, fue algo que definitivamente te enseña muchísimas cosas.

Al principio estaba un poco nervioso por saber como seria todo, desde el momento de mi llegada a la ciudad, hasta el trato y recibimiento que tendría en la universidad (BUAP), incluso la cantidad de personas de intercambio al igual que yo asistirían a dicha universidad. El primer día fue algo extraño, pues me sentía un poco desubicado, estaba acostumbrado a algo diferente, pero fue cambiando con el tiempo, pues me fui acostumbrando. Los maestros fueron muy amables conmigo y algunos compañeros de intercambio desde el primer día hasta el último de clases. La universidad era muy grande, dividida en facultades, contaba con servicio de autobús (lobobus), este recorría toda la universidad y no tenia ningún costo, además contaba con bicicletas (lobobici) la cual tampoco tenían ningún costo adquirirla para andar por la universidad respetando los carriles para dicho medio de trasporte.

Por otra parte fuera de la escuela, las amistades que logre hacer, son amistades que en poco tiempo logré tomar mucho cariño, personas de diferentes países con diferentes costumbre y formas de hablar, aprendí un poco de todos y me enseñaron a ser en definitiva mejor amigo, a respetar y a que no importa que tanto tiempo tengas de conocer una persona, unos meses bastan para darte cuenta de sus valores y el tipo de persona que son. Fueron muchos momentos que viví con ellos, risas, viajes y fiestas. Fue tanto el cariño, que lo peor fue el momento que llegó para despedirse, en definitiva conocí personas que cambiaron mi vida, personas difíciles de olvidar y que en algún momento de mi vida estaría encantado de volver a ver.

Hablando de viajes, conocí lugares de la república, que como mexicano ni sabía que existían, alrededor de 6 estados de la republica y muchísimos lugares dentro de ellos que no recuerdo la cantidad, espacios naturales que sin duda alguna no le piden nada a zonas en Europa. Aprendí que México tiene un potencial turístico que incluso los mexicanos no sabemos que tenemos y que deberíamos aprovechar y disfrutar. Probé gastronomía de cada uno de los lugares que visitaba, infinidad de platillos típicos de nuestro país.

En el área de oportunidades también hice relaciones (amigos) que dentro de la República en un futuro podrían significar una fuente importante para conseguir un empleo, no solo con las relaciones nacionales sino también con las extranjeras.

Todo fue una gran experiencia, desde el vivir solo, extrañar tu lugar habitual, familia amigos, escuela, hasta el haber conocido demasiada gente, nacional y extranjeros.

Por mucho, superó lo que esperaba, nunca imagine vivir lo que viví, me llevo lo mejor de el intercambio, lo malo me sirve para no volver a cometer los mismo errores y lo bueno para seguir mejorando, si tengo la oportunidad de volver hacer un intercambio sin duda alguna y sin pensarlo lo volvería a realizar, y a todos aquellos que quieren hacer un intercambio le diría que no duden en hacerlo, no se arrepentirán, se vive y se valoran las cosas que en ocasiones no les damos el valor que corresponde.

Por ultimo quiero agradecer a movilidad ITSON por la oportunidad que me dieron de poder vivir esta experiencia y recomendado a los estudiantes que participen en un intercambio, que se animen a vivir la experiencia, palabras hacen falta para terminar de describir el sentimiento de vivir algo como es el intercambio.

¡Movilidad Académica, Atrévete y Vívelo!

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